Los aeropuertos pequeños presentan desafíos que pueden no darse en aeropuertos grandes. Por ejemplo, frecuentemente carecen de la infraestructura y de la maquinaria grande necesaria para realizar ciertas actividades, tales como recargar combustible. Cuando se trata de recargar sus aeronaves, los aeropuertos pequeños tienen opciones limitadas en términos de alcance, presupuesto y capacidad. Como resultado de ello, frecuentemente recurren a sistemas de recarga modulares, ya que ellos les resultan prácticos y versátiles.

Recargando una variedad de aeronaves

Por ejemplo, un sistema modular con tecnología eficiente es una gran elección para muchos aeropuertos pequeños, ya que asegura eficiencia y versatilidad en la recarga. Estos equipos tienen usualmente una plataforma levadiza tipo tijera que puede alcanzar alturas de hasta 4.20 metros. Esto es muy bueno, ya que permite que el sistema de recarga pueda llegar a aviones de diferentes tamaños y alturas, asegurando que el combustible se pueda transferir al avión sin requerir sistemas específicos para ese modelo de aeronave. Por ejemplo, un sistema modular de recarga puede abastecer a una aeronave A380 grande fácilmente, así como a otros tipos de avión que pueden tener diferentes tamaños. Esto permite que los aeropuertos pequeños briden servicios de recarga a aviones de diferentes tamaños, aunque generalmente den servicio a aviones más pequeños.

Un sistema modular de recarga viene también con un brazo hidráulico, así como con carretes para manguera simples o dobles en la parte posterior. Esto le da al diseño la muy necesaria flexibilidad así como la altura, permitiendo que las mangueras de combustible se adapten a la aeronave y se extiendan o retraigan de manera segura y eficiente, haciendo mucho más sencillo el proceso.

Flujos de combustible eficientes

Muchos sistemas modulares de recarga tienen caudales grandes de hasta 4000 litros/minuto (1000 galones americanos/minuto), lo que los hace rápidos y competitivos cuando se comparan con otros sistemas de recarga. Aunque el caudal de un sistema de recarga no es el único parámetro, un caudal grande le permite al aeropuerto hacer más sencillas sus operaciones y la logística, aumentando la rapidez y el tiempo entre cambios.

Cuando se trata de aeropuertos, lo ideal es abastecer el combustible de la manera más rápida, eficiente y fluida posible. Después de todo, cualquier demora en los aeropuertos puede tener repercusiones catastróficas y dificultar la continuidad. Aunque este es un problema que se presenta en todos los aeropuertos, es más cierto aún para los aeropuertos pequeños, que tienen recursos e infraestructura limitados para afrontar demoras considerables y problemas de gran escala.

Lo más importante

La versatilidad de un sistema modular de recarga es lo que realmente hace la diferencia, ya que garantiza que un aeropuerto pequeño pueda manejar cualquier tipo de avión que llegue a él, ya sea un pequeño avión biplano o una aeronave A380. Un sistema modular de recarga también hace mucho más sencillo el proceso de recarga para el personal de tierra, quienes no tienen que mantener registros detallados de cuáles son los sistemas de recarga que deben usarse para tal o cual aeronave, algo que podría convertirse rápidamente en una pesadilla logística. Simplemente, los sistemas modulares le dan a los aeropuertos pequeños la velocidad, confiabilidad y versatilidad que requieren para hacer que las cosas se desarrollen de manera eficiente.