El oro es uno de los principales metales y minerales que se extraen en el Perú. Algunos otros productos son el cobre, la plata, el zinc, y el estaño. Siendo el oro una moneda de carácter global, y una de las pocas que permanece estable, su extracción se ha vuelto un negocio rentable en el Perú. A nivel global, se extrajeron 3100 toneladas métricas de oro en el 2016, ¿pero cuánto de esto proviene de compañías mineras en el Perú?
Globalmente, las compañías peruanas se encuentran en el sexto lugar.
En el 2016, las minas de oro del Perú pasaron del sétimo al sexto lugar. El país alcanzó su máximo a comienzos de la década del 2000 con 208,000 kg. en el 2005, y ahora produce un promedio de 140,000 a 150,000 kg cada año. Esto genera un impresionante ingreso de divisas para el país, en la forma de impuestos para mejorar los programas de asistencia social.
Por qué el Perú podría estar en una mejor colocación que el sexto lugar.
Los mineros artesanales representan un impresionante 25% de los mineros peruanos. Si bien es cierto que muchos se dedican a la extracción y venta de su oro de manera honesta, una gran cantidad de mineros artesanales extrae y vende su oro ilegalmente en el mercado negro. Esto hace que muchos se pregunten si realmente el Perú está en el sexto lugar a nivel global, o en un puesto más arriba. Los mineros artesanales conducen operaciones más pequeñas, pero el volumen de las pequeñas operaciones mineras simplemente no puede ser ignorado.
La evidencia ambiental de la minería ilegal.
Los mineros ilegales conducen operaciones con pocos trabajadores, y la evidencia de la explotación en el medio ambiente es clara. Hay miles de operadores no supervisados que extraen en la selva amazónica. A la fecha, estas operaciones representan más de 200 millas cuadradas de deforestación. Gran parte de ello se produce por la contaminación debida a sus operaciones en menor escala, y a los árboles y al follaje que se remueve para hacerle espacio a sus torres, excavadoras y equipo minero. Muchos de estos mineros todavía usan mercurio en la extracción, ya que éste atrae escamas de oro haciendo que la extracción sea rápida y sencilla. Sin embargo, el mercurio envenena los ríos y las orillas de los ríos así como la vegetación. Esta agua contaminada frecuentemente se torna naranja, marrón o celeste. A pesar de estar contaminada, esta agua es fuente para muchos seres humanos y animales salvajes. El envenenamiento se ha hecho tan serio en algunas zonas del país, que el Perú ha tenido que declarar el estado de emergencia hasta que se resuelva el problema de la toxicidad.
Las compañías mineras globales no corren el riesgo.
Las compañías mineras globales que siguen los canales debidos para extraer en lugares aprobados por el gobierno, son hechas responsables de mantener prácticas amigables con el medio ambiente. Su meta es extraer tanto oro como se pueda, pero con un impacto negativo limitado sobre el ecosistema local. Si extraen de manera irresponsable, serán hechas responsables y sometidas a multas. Si no cumplen con sus contratos, corren el riesgo de perderlos, lo que es algo que las principales compañías mineras que operan en el Perú simplemente no desean arriesgar.
De cualquier forma que se le mire, la extracción de oro en el Perú seguirá siendo una fuente lucrativa de ingresos para el país, para las minas globales, para los pequeños mineros legales, y para las operaciones mineras ilegales. Pero con el volumen de la minería ilegal, la cantidad exacta de oro extraído en el Perú cada año resulta imposible de calcular con precisión.