Los carretes de alta calidad para almacenar mangueras y pistolas son una parte esencial de cualquier taller limpio y ordenado. Ellos sirven para organizar el despacho limpio y seguro de lubricantes, con un diseño que facilita el despacho sencillo a maquinaria, motores y a todo tipo de vehículos. Este sistema de despacho es útil no solamente en automóviles y otros vehículos, sino también en todo tipo de talleres que necesitan suministrar volúmenes mayores de lubricantes de manera regular.
Este sistema de carretes se puede instalar sin incurrir en grandes gastos. Debe incorporarse al taller de tal forma que sea fácil de usar, y es muy durable. Hay una creciente demanda por parte de las diversas industrias para mejorar la limpieza de los aceites y fluidos, así como para reducir la manipulación y el intervalo entre un servicio y otro. Así, ha habido cambios progresivos en los talleres desde el despacho de productos envasados hasta el despacho de productos a granel empleando líneas de suministro en los talleres.
De acuerdo con las normas de la industria, el contenido de suciedad en el taller se incrementa un grado cada vez que los fluidos se transfieren de un recipiente a otro. Los talleres de avanzada ahora disminuyen el número de trasvases mediante el novedoso método de bombear los fluidos desde sus contenedores a los componentes de las cajas de cambios, motores, o donde se requieran estos fluidos.
Los beneficios de tener carretes con manguera y pistola para despachar lubricantes es que se reduce la cantidad de derrames al transferir los lubricantes desde los contenedores a granel y cilindros. Esto ayuda a reducir los costos y los desperdicios. Otro beneficio es el ahorro que se produce al reducirse el fluido residual en los cilindros, aumentando la eficiencia. Tampoco hay necesidad de guardar estos fluidos en cilindros que ocupan espacio en el taller. Además aumenta la limpieza en el taller al haber menos derrames de líquido. Se mejora la gestión, y se hace más fácil mantener los estándares de la industria. Asimismo es importante la reducción de lesiones ocasionadas por el manejo manual.
Hay diversas opciones para guardar los fluidos en un sistema de carretes. El almacenamiento se puede diseñar para cumplir con las necesidades específicas de un taller. Las opciones incluyen sistemas de almacenamiento IBS en uno o dos niveles; tanques SWF de 500, 1000 o 2000 litros; y tanques de doble pared de 1000, 2000 o 10000 litros. Otras opciones para los tanques incluyen el monitoreo a distancia del nivel del líquido, la limpieza del aire usando respiraderos de 2 micrones; y la prevención de sobrellenado de tanques electrónicos y neumáticos.
Hay partes específicas del sistema que pueden incluir bombas eléctricas o neumáticas; recipientes para aceite usado con retorno a tanque; filtración de la descarga; pistolas para el control de despacho; filtración de grasa; medidor de despachos en la pistola o en la línea; estructura tubular de acero inoxidable 316; desfogue térmico en la estructura del fluido; etiquetas y códigos de color; unidades de mantenimiento para el aire con aceiteras, filtros, o regulador; manómetros de presión; y válvulas de aislamiento positivas para aire y fluidos.
Los fabricantes del sistema también pueden incluir carretes para mangueras en tamaños estándar; filtración de líneas de llenado; medidores de lote para registrar volúmenes de manera precisa; protección de las superficies por arenado y pintura/galvanizado; protección por cierre; y monitores de presión del sistema.
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